La duración de un curso online es una de las mayores dudas a las que se enfrentan los formadores elearning y las empresas organizadoras de formación. En muchas ocasiones resulta complicado decidir si tu curso debe ser corto y conciso sin dar muchas vueltas en la materia o si por el contrario debe ser largo y profundizar. La decisión final va a estar determinada por el público al que se dirige el curso y también por la propia materia.
Algunas estadísticas estiman que el tiempo medio que los estudiantes dedican a cada sesión de aprendizaje suele rondar alrededor de los 15 minutos. Cabe destacar que este periodo de tiempo supera con creces los 2 minutos de media que suelen pasar de media los usuarios conectados en una web. El objetivo es claro: ¿cómo conseguir que los alumnos permanezcan tanto tiempo conectados a la plataforma?
Que el curso tenga la duración adecuada es muy importante, ya que asegura que los alumnos terminarán la formación de forma satisfactoria, no sintiéndose aburridos ni tampoco con la sensación de que le falta información. El tener estudiantes motivados y contentos aumenta las posibilidades de que quieran hacer más cursos con tu marca. Un buen curso online puede hacerle la competencia perfectamente a otros formatos muy exitosos de internet como el vídeo, y enfrentarse a plataformas como youtube. No obstante, la idoneidad de la duración va a jugar un papel fundamental.
La duración de un curso online puede variar según distintos formatos
Para conseguir que la duración de un curso online sea adecuada es imprescindible pensar en los diferentes formatos en los que se van a presentar los contenidos a los alumnos. El nivel de atención del estudiante en la formación dependerá directamente del formato presentado.
No obstante, hay que tener presente que dichos formatos también deben estar optimizados y pensados para mantener la atención. Por ejemplo, los vídeos deben llevar una llamada a la acción para aumentar su efectividad. Dirigir los conocimientos del alumno ayudará considerablemente a asimiliar la información mejor.
Con respecto a la relación entre el formato presentado y la capacidad de atención y concentración, vamos a destacar los siguientes tipos:
- Los vídeos: el contenido audiovisual es el más efectivo en la formación, y también el más utilizado. Las estadísticas presentados por youtube, la mayor plataforma de vídeo, establece que la tasa de abandono de los vídeos comienza a partir de los 3 minutos. Este elemento juega un papel fundamental en la duración de un curso online.
- Las tiendas online: las tiendas online aprovechan el primer impacto para hacer las ventas. La estimación es que a partir de los 2 minutos, los usuarios comienzan a abandonar el sitio web. Estos datos no están relacionados directamente con mantener la atención durante la formación, pero resultan muy útiles para el momento de la venta. Hay que captar la atención rápidamente para tener éxito.
- Los blogs: está comprobado que a partir de los 5 primeros minutos, el interés de los visitantes disminuye. Por eso, se recomienda que los artículos tengan alrededor de 1000 palabras de media, lo que es suficiente para desarrollar un contenido de calidad. Además esto potencia que la lectura se realice completamente. Estos datos son muy interesantes a la hora de redactar el contenido textual de tu curso.
Cómo aumentar la atención de tus alumnos durante un curso elearning
Para decidir la duración de un curso online es importante que te plantees cómo conseguir la mantener el nivel de atención de tus alumnos. Como hemos dicho, estos aspectos vienen determinados por el tipo de contenido y de estudiantes. No olvidemos que, por ejemplo, el aprendizaje en adultos tiene sus propias características. Sin embargo, vamos a nombrar algunos tips que seguro te ayudarán:
- Utilizar un título descriptivo: Según las estadísticas, los artículos que mejor funcionan tienen una media de entre 12 y 18 palabras. Menos da muy poca información sobre el tema, y más es sobre-optimizar. ¿Qué tiene que ver un blog con un curso elearning? Muy sencillo. Si aplicas esta lógica a tu temario, atraerás más a tus alumnos. Si no estas familiarizado con las métricas y las analíticas en la red, puede resultarte extraño. Pero el número de palabras y caracteres realmente influye en los resultados. Respetando siemprel a redacción con un lenguaje natural.
- Crea un contenido original y personalizado: ofrecer al alumno un contenido que ya conoce juega en tu contra para conseguir mantener el interés. No te excedas en lo obvio y céntrate en lo que quieren aprender tus estudiantes. Cundo vayas a crear la estructura del curso, ten siempre presente cuáles son las necesidades que tu formación va a cubrir.
- Menos es más: seguro que esto te suena. Pues en elearning también se aplica. Es importante que te plantees si el tiempo dedicado a la sesión se corresponde con el tiempo de aprendizaje. Esto se traduce en que si tienes contenido que no aporta un valor real a los estudiantes, es mejor que lo suprimas o lo resumas. Es mejor que dividas la información en pequeñas fracciones.
Intenta tener presente qué es aquello que necesitan tus estudiantes para convertirse en profesionales cualificados y competentes.
La mejor duración de un curso online: ¿express o en profundidad?
¿Cuál es la mejor duración de un curso online? Hay quien piensa que es mejor un curso largo que profundice en los conocimientos. Otros profesionales opinan que dependiendo de la materia, puede ser más beneficioso un curso express que dote a los profesionales de los conocimientos mínimo necesarios para desarrollar una nueva habilidad, que es al fin y al cabo lo que muchos buscan. Ambas opciones son correctas y ambas equivocadas, ya que las características y las posibilidades son diferentes.
Cursos Express
Es cierto que hay determinados contenidos que se pueden consumir en un muy corto periodo de tiempo. Es el llamado microlearning. Estas pequeñas píldoras formativas pueden llegar a durar tan sólo unos minutos. En estos casos, el contenido se puede presentar en un formato vertical en lugar de en diapositivas, ya que permite un consumo más rápido. Este tipo de formación suele ser muy demandada en las empresas, que quieren centrarse en nuevas habilidades concretas.
Además, los trabajadores y la propia corporación no suelen disponer de demasiado tiempo para invertir en procesos de aprendizaje. Aunque no hay una regla exacta, estos cursos tienen una media de duración de 15 minutos aproximadamente.
Curso clásico para profundizar
Hay contenidos que por su propia naturaleza requieren de un mayor periodo de tiempo, ya sea por complejidad o por cantidad de información. En estos casos el curso se divide en secciones y subsecciones, para que sea más sencillo mantener la atención. Estos cursos tienen una mayor duración, que puede ir desde los 14 días hasta los 3 ó 6 meses (habiendo algunos de hasta 1 año). En este caso suele tener más sentido realizar un test evaluativo final o incluso por secciones, ya que se produce un aprendizaje continuo en el tiempo. En un curso express, tiene menos sentido plantearlo de esta manera. En estos, además, puedes ofrecer más variedad de formatos (vídeos, galerías, podcast, artículos, etc).
Estas formaciones se suelen llevar a cabo fuera del contexto de la empresa, es decir, en academias online u otras entidades de formación.