Hoy celebramos el Día Internacional de la Mujer, 8 de marzo 2020, y nuestros sentimientos de paridad de género e igualdad salarial siguen siendo fuertes en nuestros corazones y mentes.
Aunque los estudios confirman que entre los diversos activos que tiene cada organización, el hecho de tener mujeres en puestos de liderazgo aporta más innovación, mayor productividad y un mejor desempeño financiero, la verdadera noticia es que cuando se trata de puestos de liderazgo, las mujeres ocupan apenas un 20%.
Con los años, la barrera invisible que impide que las mujeres avancen en los lugares de trabajo se ha denominado colectivamente como el fenómeno del “techo de cristal”.
Fuente imagen: https://mentesbrillantes.tv/2019/03/21/…
PERO, ya es hora de que las mujeres (no solo unas pocas, sino todas) nos preparemos para enfrentar los desafíos.
Sabemos que hay algunos factores críticos que todas las personas necesitamos para tener éxito en nuestra carrera y uno de los principales es el aprendizaje continuo. Las mujeres que tienen mucho éxito, puntúan sobre otras en este aspecto. Son aprendices de por vida, y esto ha contribuido significativamente al éxito de su carrera.
¿Qué es el aprendizaje continuo?
El aprendizaje continuo significa mantener la curiosidad sobre varios temas. Las personas que son “alumnas” de por vida se esfuerzan por buscar información de diferentes fuentes todo el tiempo. Esto les da una ventaja sobre otras en forma de mejores ideas y acciones. Ser siempre aprendiz, tener un apetito insaciable por conocer no solo las cosas que conciernen directamente a nuestro trabajo, sino también sobre otras áreas que nos enriquecen.
Se sabe que expandir constantemente nuestros horizontes y aprender activamente cosas nuevas no sólo aumenta nuestro conocimiento sino que mejora nuestro crecimiento profesional y personal.
¿Cómo pueden las organizaciones alentar a sus empleadas a desarrollar la capacidad de aprendizaje continuo? Y, ¿cómo asegurar que las mujeres (en todos los puestos) estén equipadas para ascender en la escala corporativa con las mismas oportunidades de aprendizaje y desarrollo?
Aquí tenemos algunas formas de hacerlo a través de enfoques tecnológicos:
1. Proporcionar acceso al aprendizaje continuo
Para la mayoría de las personas, la verdadera tarea es equilibrar sus vidas profesionales y personales. Con muchas cosas que hacer, es útil que las empresas y organizaciones puedan brindar la oportunidad de aprender más a sus empleados a través de modelos de aprendizaje flexibles gracias a la tecnología, como por ejemplo el e-Learning. Otra buena opción es el aprendizaje a través del móvil (también conocido como mobile learning) que se enfoca en proporcionar contenido de aprendizaje breve sobre temas muy concretos. Adoptar un sistema de gestión del aprendizaje o LMS (Learning Management System en inglés) y aprovechar sus diversas características, como el aprendizaje social, informal y colaborativo, puede crear oportunidades de aprendizaje constantes.
2. Diseñar programas de aprendizaje personalizado
El contenido de aprendizaje es más efectivo cuando se diseña teniendo en cuenta las competencias y los requisitos individuales de cada persona. Las organizaciones y empresas pueden proporcionar una experiencia de aprendizaje individualizada, flexible y personalizada de acuerdo con los roles, funciones, niveles de carrera, etc.
3. Ofrecer soporte
Otra manera de facilitar el aprendizaje continuo en el trabajo es ofrecer herramientas de soporte en el momento “preciso” de necesidad directamente integrados en el flujo de trabajo, a las que se accede desde el móvil.
En conclusión, estar en constante aprendizaje nos ayudará a aspirar a puestos de trabajo más elevados y mejor remunerados, pero también es responsabilidad de una organización asegurarse de que todo su equipo tenga acceso a los recursos de aprendizaje correctos continuamente.
La diversidad de género en los lugares de trabajo y más mujeres en puestos de alta dirección pueden ser el resultado de haber adoptado en una organización una buena estrategia de aprendizaje continuo.